Tiempo en Jerusalén
Verano en Jerusalén
Viajar a Jerusalén en verano es garantía de sol, calor y termómetros que fácilmente superan los 35ºC. En los meses de junio, julio y agosto los días tienen hasta doce horas de luz, lo cual es perfecto para visitar los principales monumentos de Jerusalén.
Sin embargo, el calor en Jerusalén resulta excesivo en verano. Además, es bastante frecuente que lleguen brisas secas y calientes del desierto de Arabia que agravan todavía más el caluroso tiempo de Jerusalén en estos meses.
Si no tenéis problemas de fechas, os recomendamos evitar viajar a Jerusalén en verano. Si no tenéis opción, recordad llevar ropa ligera, gorra y agua.
Invierno en Jerusalén
Al contrario de lo que pueda parecer, en Jerusalén hace frío en invierno. Las pocas lluvias que registra la ciudad se concentran en estos meses, por lo que no olvidéis llevar paraguas si decidís viajar a Jerusalén en invierno.
Aunque la ciudad solo registra un promedio de un día de nieve al año, las temperaturas de Jerusalén en invierno pueden caer hasta los 0ºC, pero suelen oscilar entre los 5ºC y 10ºC. En las contadas ocasiones en que ha caído nieve en Jerusalén, la imagen de la Cúpula de la Roca teñida de blanco ha dado la vuelta al mundo.
Mejor época para viajar a Jerusalén
La mejor época para viajar a Jerusalén es primavera y otoño. El clima de Jerusalén es mucho más agradable en estas estaciones, cuando es posible huir del frío y del calor que la ciudad vive el resto del año. La primavera y el otoño son estaciones perfectas para visitar Jerusalén y aprovechar para bañarse en el Mar Muerto o visitar otras ciudades de Israel.
Es importante tener en cuenta que los precios de Jerusalén aumentan en esta época del año, sobre todo en Semana Santa. Viajar a Tierra Santa durante los días festivos de Pascua significa pagar mucho más por el vuelo y el hotel.
